Formatear es un procedimiento informático que permite marcar el espacio de un disco como espacio que utilice un formato concreto de archivos. Existen diversos formatos de archivos según utilicemos Windows, Linux, Apple …
Por ejemplo, Windows utiliza el formato NTFS, Linux utiliza ext2, ext3 y ext4 (hay más pero estos son los más utilizados) , y macOS utiliza HFS y HFS+.
Cuando formateamos un disco, marcamos el espacio como espacio libre para ser utilizado para nuevas instalaciones, aunque los datos siguen estando ahí … solo que es difícil recuperarlos. Pero un simple formateo no elimina totalmente los datos de un disco.
También tenemos el formateo a bajo nivel, que es el formateo más exhaustivo que se puede realizar a un disco.
El formateo se utiliza también para comenzar “desde cero” una nueva instalación de un sistema operativo; muchos errores , sobre todo “lógicos” se solucionan con el formateo; los errores físicos ya son otra cosa; cuando hay un error físico en el disco suele ser permanente. Lo único que se puede hacer en estos casos es marcar los sectores defectuosos como sectores no utilizables.
